Hoy volvemos con otra receta de esas de tardes de cine y fútbol…
Aquí en Valencia son muy conocidos los pepitos de pisto. Para los que no sepan lo que es, son unos panecillos rellenos de frito de tomate y pimiento que luego se pasan por leche y huevo y se fríen.
Se suelen hacer para celebraciones como cumpleaños, santos, etc. y la verdad es que, a parte de estar riquísimos, son bastante resultones.
¿sabéis cuando los suelo hacer yo? pues cuando tengo tomates bastante maduros y los quiero aprovechar. Preparo un buen pisto con ellos y relleno los pepitos. Los frío y los congelo. Así se mantienen bien y luego sólo hay que descongelarlos y calentarlos de nuevo en el horno a 180º. De esta manera, vuelven a quedar crujientes.
Con los pepitos pasa como con cualquier otra receta, que cada maestrillo tiene su librillo… y cada uno tendrá su receta y su manera de rellenarlos particular. Así que os voy a contar la mía.
Os voy a enseñar cómo darles un toque extra crujiente que los hace todavía más irresistibles. ¿Queréis saber cómo? pues no os hago esperar más…vamos allá!! Sigue leyendo