Buenos y dulces días…Hoy lunes, la oveja negra de la semana. Recién llegados del relax y desconexión del fin de semana, parece que el lunes sea el peor día de la semana. En muchas ocasiones, el comenzar de nuevo con la rutina no nos motiva lo suficiente y hace que tengamos el lunes en el punto de mira de críticas y quejas. Pero lo más gracioso es la manera en que exteriorizamos la poca simpatía que le tenemos:
– Los bostezos. ¿Os habéis propuesto alguna vez contar las veces que bostezas durante la mañana de un lunes? yo sí, pero siempre pierdo la cuenta… Son casi infinitas!
– Las caras. O mejor dicho “los caretos”, al menos el mío. Suena el despertador 50 veces y tú sin darte cuenta y a la que hace 51, tu oído empieza a percibir muy de lejos un sonido repetitivo y molesto con el que tu cerebro asocia que te tienes que levantar. Te levantas medio sonámbulo y tus piernas te llevan ,sin darte cuenta, hasta el cuarto de baño y, de repente, te encuentras cara a cara con el señor espejo (con un ojo medio abierto y el otro medio cerrado)…es en ese instante cuando te despiertas del susto diciendo: “Madre mía, pedazo caretoooo….”
Pues todo esto se acentúa 100 veces en los que trabajamos de noche. Pero hoy he querido que fuese diferente y ,tal vez, si comenzamos la semana con algo dulce y delicioso, el lunes sea menos lunes…Feliz día!
Anímate a preparar esta deliciosa receta con tu toque personal y comparte tu foto y comentarios conmigo 😉
INGREDIENTES
- 6 cucharadas soperas de azúcar
- 1 bote pequeño leche condensada
- 1 tarrina queso crema
- 4 huevos
- 1 cucharada sopera de miel
ELABORACIÓN
- Encendemos el horno a 180º y colocamos una bandeja honda (donde nos quepa luego la flanera) con agua.
- Con el azúcar hacemos un caramelo y lo volcamos en la flanera
- En un bol echamos el resto de ingredientes y lo batimos todo bien.
- Volcamos la mezcla en la flanera y colocamos ésta en la bandeja con agua que tenemos ya en el horno.
- Horneamos al baño maría durante 30 min más o menos
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